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lunes, 25 de agosto de 2014

Un Veyron más rápido no es lo que necesita el mundo del coche


Es como si la junta directiva de VW - y una persona en ese tablero, en particular, - absolutamente se niega a dejarlo descansar, a pesar del hecho de que el mundo del automóvil ha demostrado con toda claridad que no está interesado en un club de caballeros 270 mph en las ruedas. Y cuando digo que interesa, quiero decir interesado en comprar.

Los gustos de ustedes y son seguramente que la idea original para el Veyron fue-relamerse los labios deliciosos, hice no. Y por mi parte, nunca, nunca olvidaré el primer día que conduje uno en el lanzamiento del coche en Sicilia. Fue, y sigue siendo, una de las experiencias más extraordinarias que he tenido jamás en las cuatro ruedas.

Pero desde entonces, la historia Veyron ha desentrañado poco a poco y ha perdido su dignidad. ¿Por qué? Debido Bugatti no pudo encontrar suficientes compradores para el coche, básicamente. La gente los compró (gente muy, muy ricos cierto), pero luego esas mismas personas encuentran que en realidad no lo utilizan lo suficiente. Y luego, invariablemente, que vendían. Corre el rumor de que menos de 50 individuos nunca han sido dueños de un Veyron.

El resultado final ha sido una serie de versiones diferentes, cada una ligeramente mejor que la siguiente, cada uno un poco más rápido y así sucesivamente. Y poco a poco la moneda del coche ha sido erosionado.

Con el tiempo, incluso nos tuercas del coche comenzaron a llegar muy ligeramente aburrido de Bugatti producir otra versión. Todavía es incierto aún hoy si la buena gente de Molsheim han conseguido vender todas las 350 Veyrons que dijeron que iban a vender, allá en ese lanzamiento en Sicilia en 2005.

¿Qué es lo que quiero decir cuando digo que el mundo del automóvil - el que compra, no el que simplemente sueña - ha demostrado que no está interesado en un club de 270 mph de caballeros sobre ruedas.

La respuesta de Bugatti? A 286 mph, 1479bhp club de caballeros en las ruedas. Esta vez con propulsión híbrida para darle ese toque adicional de borde en el que cuenta, con un guiño a los ecologistas a la vez. Genius. O tal vez no.

Sr. Piech es probablemente una de las personas más inteligentes que jamás haya adornado la industria del automóvil, y muchas de sus ideas han sido revolucionarios. Pero un coche de dos toneladas con 1500BHP que tiene la capacidad (en teoría) para viajar más rápido que cualquier otro coche de carretera en la tierra al tiempo que ofrece la comodidad y la civilidad de una limusina es, me temo, ya no es uno de ellos.

En los primeros noughties era, tal vez, porque nunca nadie había soñado con un dispositivo de este tipo con anterioridad. Y cuando Bugatti finalmente cumplió con su promesa del Veyron, sólo por un momento, parecía una deidad entre los coches.

Pero luego de ese momento pasó. El mundo siguió adelante. Todos sabemos ahora que la velocidad máxima absoluta y final de lujo no son el santo grial, ni siquiera entre el mundo enrarecido de la uber-coche. En cambio, menos peso, menos velocidad punta, mayor agilidad y el rendimiento más utilizable se han convertido en los ingredientes clave. Desde entonces la fórmula del Veyron ha aparecido cada vez más arcaico.